Nacho conoce bien los campamentos de población refugiada saharaui. Los ha visitado anualmente a lo largo de los últimos años como miembro de la comisión médica asturiana que desde hace dos décadas atiende a los afectados por la diabetes y el bocio, enfermedades que afectan con mayor incidencia a esta población por la falta de una dieta variada de productos básicos y por la vida sedentaria que las condiciones desérticas les obligan a llevar. Y este conocimiento de su gente se constata en sus fotografías. Tanto como su empatía, respeto y cariño por el pueblo saharaui. De ahí, su mirada cercana, pausada y centrada en la vida cotidiana de su gente.
Por ello, hemos preparado una exposición con veinte de sus instantáneas en las que se refleja la capacidad de superación de los obstáculos, la paciencia y la alegría con la que este pueblo se enfrenta al abandono internacional que los ha condenado a sobrevivir en medio de un desierto pedregoso e inhóspito.
La exposición se puede visitar hasta el 4 de marzo en la sala Borrón de Oviedo y a partir de entonces será mostrada en numerosos municipios, centros educativos y universidades asturianas de los que os mantendremos al tanto.